«Diccionario» es una palabra que deriva del verbo latino dico y de su participio de pasado pasivo: dictum,del que deriva, a su vez, el sustantivo dictio: ‘lo que se ha dicho’. El sufijo -ario  aparece en otras palabras como «armario», y designa ‘el lugar donde se guarda algo’. En este caso: ‘lo dicho’.  

Fue Juan de Garlandia, un lexicógrafo inglés de comienzos del siglo XIII, quien usó por primera vez el término (antes se llamaba glosarium) , y lo explicó de esta manera: «Se llama “diccionario” a un libro no muy extenso que contiene las expresiones más necesarias  que un estudiante ha de retener, no solo entre las tapas de madera de su libro, sino en el armario de su corazón, allí donde se guarda la memoria, y que le facilitarán la construcción de su discurso»

Y todo esto viene a cuento de que este cuarto número de El Aedo intenta ser un pequeño diccionario de narración oral. No tenemos noticia de que antes se haya publicado algún diccionario monográfico similar, solo sabemos de algún alfabeto como el que publicó la narradora estadounidense Laura Packer en su blog a lo largo del mes de mayo de 2013 y que fue la chispa que inició este proyecto. Aunque hay diferencias entre ambas propuestas: mientras que el alfabeto contiene una palabra por letra, el diccionario recoge varias voces por letra, y mientras que el alfabeto fue elaborado por una sola persona, este diccionario ha sido posible gracias a la colaboración de ochenta y ocho personas, que desinteresadamente se animaron a echar una mano. A todos ellos, gracias, muchas muchas gracias.

En este diccionario encontrarás guardado, pues, y bien ordenado, lo que se ha dicho sobre las palabras que nos han parecido claves en la narración oral. Guárdalas en tu corazón y úsalas cuando hables de nuestro oficio.

Pero ten en cuenta que este es un diccionario de narración oral que no pretende ser exhaustivo. Es más un divertimento ordenado alfabéticamente, unas ganas de pensar sobre esas palabras que usamos para describir nuestro oficio, un deseo de escuchar a nuestros compañeros hablando de las entradas que constituyen este diccionario. 

Quizás eches en falta algún término o pienses que hay significados que podrían ser ampliados, no te apures, este cuarto número de El Aedo es un punto de partida, pronto, tal vez en un par de meses, todo el diccionario podrá ser consultado on-line en nuestra página web, donde, además, se seguirá incorporando entradas, enriqueciendo las ya incluidas y promoviendo el debate y la discusión entre sus usuarios.  

Pero basta de introducciones y escuchemos sus voces.

 
Ana, Charo, Estrella, Manuel y Pep
Comisión Contenidos AEDA