Se suele denominar "Clínica" a un tipo de taller en el que los asistentes (narradores generalmente ya en activo) cuentan un cuento y reciben la devolución del experto que dirige el taller y del resto de participantes. En esa retroalimentación se suele comentar tanto el texto elegido como su preparación y puesta en escena. Es una práctica bastante extendida en países de América.

Existe una variación de este tipo de taller (de la que he tenido noticia en España) en la que los asistentes cuentan un cuento que está "enfermo", es decir, que no termina de funcionar por el motivo que sea: no dan con el ritmo preciso para contarlo, o el final resulta fallido, o hay algo en su estructura que no termina de funcionar, o, en fin, tienen algún problema con él y no consiguen encontralo, etc. El resto de participantes tratan de ayudar con sus comentarios y sugerencias para encontrar el problema que el cuento tiene y, también, aportando soluciones posibles al mismo.

 

Pep Bruno