Se acaba 2017 y con él un año repleto de historias, cuentos contados a viva voz en bibliotecas, colegios, teatros, calles y plazas. Un año más en el que hemos compartido nuestra palabra.

Ya somos cuarenta. Cuarenta narradores y narradoras como cuarenta días y noches de lluvia que, al igual que un esperado aguacero, refresca al mundo con sus historias. El número cuarenta marca la terminación de un ciclo y la aproximación de un cambio. Este año llega a su fin y hacemos balance con ánimo de que las horas del año que se acerca vengan cargadas de mejoras, de acción y de cuentos.

En cuarentena se mantiene el IVA cultural con su asfixiante 21%, pero, aun así, nuestro oficio permanece, renace, se reinventa.

Durante este 2017 han continuado y se han creado nuevas programaciones de cuentos para público adulto e infantil por la amplia geografía española. Todo gracias a la valentía, la gestión, la escucha y la programación tenaz —a pesar del cansancio y las dificultades— de las personas responsables de aquellos lugares donde las historias son las protagonistas.

Un año más seguimos dando difusión a nuestro oficio a través de la agenda, con información mensual actualizada de las actividades de narración oral que se realizan, incluyendo los espacios de cuento.

Continuamos creando y compartiendo nuestros boletines mensuales publicados en la web de AEDA con el objetivo de dar a conocer a socios, a compañeros de profesión y a aquellos que se interesan por la narración, las experiencias en torno al cuento de diferentes comunidades, países y continentes.

Nuestras redes siguen funcionando de maravilla. Con casi 1900 seguidores en Twitter y 4900 en Facebook, con una media de 34 307 visitas mensuales en nuestra web, hemos trabajado cada día por la visibilidad de nuestro oficio.

En el ámbito de la formación hemos celebrado la IV Escuela de Narración Oral y la III Jornada de Animación Lectora en Alcalá de Henares durante la primera semana de julio. Ambas contaron con muchísimo éxito de público y magníficos resultados en las evaluaciones.

También hemos celebrado los premios que se han otorgado a Eugenia Manzanera, Carlos Alba, Virginia Imaz y Mario Cosculluela. La primera obtuvo el premio al espectáculo de pequeño formato de la Feria Europea de las Artes Escénicas para Niños y Niñas (Feten); el segundo ha recibido el “Nel Amaro” de teatro por su “Lazarillo”; la tercera, el Emakunde, premio a la igualdad por ser pionera e innovadora en las artes escénicas con conciencia feminista. El último se hizo con la Mención Especial del Jurado dentro de la categoría Marcelino al mejor espectáculo de Circo aragonés aunando narración oral y circo. Estamos muy orgullosos de que AEDA la formen grandes profesionales de la narración que sean reconocidos de esta manera.

Por otro lado, AEDA, como miembro del Consejo del Libro, condujo la entrega de los Premios Lazarillo en el Salón del Libro de Madrid. Un evento lleno de actividades relacionadas con los cuentos y los libros.

En un año que ha atravesado situaciones políticas complicadas en el país, hemos querido recordar, a través de este Comunicado, el derecho a usar cualquiera de las lenguas que se hablan en nuestro país para contar cuentos.

Somos cuarenta. Cuarenta voces, cuarenta profesionales asociados y cuatro más. Cuatro socios de honor maravillosos. Este año este título ha recaído en nuestra admirada Marina Navarro.

Despedimos 2017 con cuentos, cerramos el ciclo y seguimos abriendo la palabra a la vida.