Contar en 2016
Aquí estamos un año más después de haber recorrido el camino de los doce meses, las cuatro estaciones, los 365 días; y una vez más toca hacer balance de lo vivido durante este último año.
La mala noticia sigue siendo la misma de años anteriores: la cultura no es prioritaria en la agenda política y seguimos asfixiándonos con un IVA cultural del 21%. No aceptamos que la cultura sea gravada como un producto de lujo, más bien consideramos que es un bien de primera necesidad.
En cambio, si dejamos este árbol a un lado y observamos el bosque, vemos que todavía nos quedan motivos para celebrar. Nuestro oficio está habitado de gentes que aman lo que hacen, que hacen lo que aman y que granito a granito van levantando montañas. Así es como se han mantenido programaciones de cuentos para público infantil y adulto ⎯algunas de ellas durante más de veinte años⎯ por toda la geografía española, una labor que como colectivo queremos agradecer a los tenaces programadores, fieles amantes de las historias contadas.
Seguimos queriendo mejorar el oficio con formación para narradores. Este año hemos celebrado la III Escuela de Narración Oral y la II Jornada de Animación Lectora con muchísimo éxito de público y magníficos resultados en las evaluaciones.
Un año más seguimos dando difusión a nuestro oficio a través de boletines mensuales publicados en la web de AEDA, dando a conocer a propios y extraños las experiencias en torno al cuento de diferentes comunidades, países y continentes. No es casualidad que cada vez estemos más conectados con el resto de Europa a través de nuestra participación en FEST y que el tema de nuestra revista anual (esta vez bianual, debido a la envergadura del proyecto) haya sido LUGARES EUROPEOS DE CUENTO, donde presentamos el panorama de la narración oral a nivel europeo que pretendemos seguir completando con información actualizada.