Cantabria es una comunidad pequeña. Las distancias no son muchas. Las relaciones, los contactos, las sinergias... son más fáciles que en otras más extensas. Hace seis años, las personas que de una manera u otra, nos dedicamos aquí a esto de contar cuentos, pensamos que una buena manera de celebrar nuestro día, el 20 de marzo, era hacerlo con las encargadas de los lugares donde hacemos nuestro trabajo para todo el mundo; las bibliotecarias.
Pensamos que podíamos tener un detalle con ellas: regalarles nuestros cuentos. Ellas son las que preparan sus espacios, programan y publicitan nuestras sesiones, conocen a sus usuarias/os... ellas son las que valoran lo que hacemos como nadie. Lo ofrecemos desde luego a aquellas que programan con continuidad, que se esfuerzan por convencer a sus ayuntamientos de que los cuentos son algo necesario, que trabajan de firme por crear públicos y ofrecer un espacio de cultura que vaya más allá de poner a disposición del público una selección de libros, que es fundamental, pero no basta. Confiamos en que al consolidarse esta manera de celebrar, otras bibliotecas se pregunten qué hay que hacer para que la troupe de cuenteros/as acuda a celebrar allí, y trabajen para ello. Afortunadamente, en un sitio tan pequeño tenemos candidatas para unos cuantos años más. En 2014 fue la primera vez que lo hicimos. Cuatro narradores/as y una compañía de teatro en la Biblioteca Central de Cantabria, donde repetimos en 2015. Después hemos estado en las bibliotecas de Camargo, Astillero, Los Corrales de Buelna y Polanco, en 2019, en la que con seis cuentos seis hicimos dos sesiones; una para público familiar y otra para público adulto. Para entonces la cosa había crecido. María, la bibliotecaria, preparó una auténtica fiesta, un precioso cartel, decoró el espacio para la ocasión, acudieron la alcaldesa y la Concejala de Cultura, hubo merienda... Lo dicho, una fiesta.
Este 2020 le tocaba a otra de las bibliotecas donde se mima a los cuentos: la de Bárcena de Cicero. Por razones evidentes lo hemos pospuesto para más adelante pero hemos querido celebrarlo desde casa. Creamos el hashtag #telocontamosencasa y ponemos en nuestras redes un cuento cada día durante la semana del 20M.
Ya habrá tiempo de que todo vuelva a la normalidad, los cuentos viajen otra vez de la boca a la oreja sin intermediarios y podamos festejar con Mª Eugenia que los cuentos y los cuentistas son felices en su biblioteca. Lo haremos con más alegría que nunca, porque todo habrá acabado, estaremos juntos y tendremos mucho que celebrar. Con cuentos, claro.