Sobresfuerzo

El mecanismo vocal es muy resistente y puede soportar una gran cantidad de mal uso sin sufrir daño permanente, pero es mejor no ponerlo a prueba con demasiada frecuencia.

Pautas repetidas de mal uso, especialmente el uso forzado de las cuerdas o la interferencia persistente en el abastecimiento del aire, pueden producir un daño irreversible.

Los sobresfuerzos de corta duración suelen ser parte de nuestra profesión, principalmente cuando se grita, chilla o se canta en un tono de voz para el que no estamos preparados.

Un buen calentamiento previo de las cuerdas vocales y de los músculos comprometidos en el proceso de una correcta respiración, deberían bastar, sin embargo si pese a eso, o porque no se tomaron esas medidas, afectamos la voz, aún podemos protegerla.

Si notamos fatiga, una falta del control fino de los matices, del volumen, del timbre, lo cual es normal en una voz plena, debemos proceder con cuidado.

Generalmente, cuando ya estamos inmersos en una situación doliente de nuestra voz, somos capaces de indicar el momento exacto en que el problema comenzó, tomemos nota de qué fue lo que se hizo mal y no lo repitamos, eso en primer lugar.

Si aun debes seguir usando la voz, intenta pasar a un tono sosegado y si ya puedes tomarte un respiro, entonces túmbate, si es posible con la cabeza ligeramente mas baja que los pies. Y tómate media hora de descanso, respirando abdominalmente y con el cuerpo caliente. Es decir, una manta, una bufanda al cuello, etc.

 

Si el esfuerzo y la fatiga de la voz, son menores, este descanso es altamente efectivo y con un efecto regenerativo enorme, pero de todas maneras el resto de ese día utiliza la voz con precaución.

Si notas  dolor en los músculos de la garganta y en el anclaje de la lengua y del cuello, la dolencia ya está mas arraigada. Para, descansa, y ve a un laringólogo.

Trabajo al aire libre

Si tu trabajo debe realizarse al aire libre utiliza megafonía, así no sobrepasarás los limites de tu voz. Cuida de no tener la brisa en la cara, es contraproducente para la proyección de la voz y estarás recibiendo directamente en tu garganta todo tipo de impurezas. Evita echar la cabeza hacia delante, en un claro intento de alcanzar a mas gente, mantén el cuello totalmente libre y flexible y asegúrate de que los músculos abdominales apoyan la voz.

La reacción al aire exterior, sobre todo si sales de un edificio con una temperatura diferente, puede ser un problema. Hay que intentar no cerrar las articulaciones, levantando los hombros y tensando el cuello, concéntrate en visualizar tu cuerpo a una temperatura en la que estas cómodo y rechaza toda tensión que afecte a tu voz, es decir, cuello, tórax y hombros.

Calentamiento básico

Cantar alguna canción tradicional, como La Tarara, girando, danzando y moviendo los músculos de todo el cuerpo, es un calentamiento sencillo y básico, para una actuación donde se involucra solo la voz y pocos movimientos corporales.

Imaginar que estas construyendo una máquina, emitiendo todo tipo de sonidos, pitidos (empezar por los menos agudos e ir subiendo hasta puntos cómodos) chirridos, onomatopeyas que involucren labios, mejillas, lengua, dientes. Carantoñas, bufidos y ronroneos varios, mientras se abren y cierran las articulaciones de hombros, codos, muñecas y dedo a dedo, ayudan a la circulación constante de sangre y oxígeno.

Si estas resfriado, intenta una secuencia de "a", "am", "ama" y "amam" que movilicen el paladar blando para despejar la nariz y termina la secuencia con bostezos.

Finalmente dejar unos minutos, antes de la salida a escena para organizar y atemperar el cuerpo, emocional y físicamente. Una respiración pausada, será suficiente.

Tos, resfriados e infecciones de garganta

Una tos seca y persistente es tratada mejor por un laringólogo (estamos hablando en afecciones en profesionales de la voz) ya que existe una gran variedad de medicamentos específicos para catarros, refriados, tos, gripe, que lo que hacen es retirar la mucosidad tan necesaria para el correcto funcionamiento de nuestra laringe. Si nuestra laringe no está bien lubricada y estás utilizando la voz al máximo, dañas las cuerdas vocales.

Aunque no toda la medicina está de acuerdo sobre el valor de la vitamina C, su administración, previa y durante el invierno, ayuda. Así mismo administrarse la vacuna de la gripe, previene.

Boca seca

A veces la ansiedad disminuye la secreción de saliva y la mucosidad fina que lubrican la laringe y la garganta.

Puede que trabajar la relación cabeza/cuello/espalda solucione este problema desde la raíz y seguramente ayudará a controlar el miedo escénico.

Con todo si aún tienes la boca seca, chupa un trozo de limón o huele vinagre, beber agua no ayuda. El limón es particularmente útil si estás trabajando en un ambiente seco. Es un hecho raro y a veces físicamente inquietante que los actores gastan la mayor parte de su vida laboral en ambientes que no favorecen en absoluto al mecanismo vocal.

Los teatros, estudios de cine y televisión, estudios de radio y salas de grabación casi siempre tienen ambientes sobrecalentados y secos. Esto provoca sequedad en la boca, incluso sin ansiedad

Alcohol

Beber alcohol en exceso antes de una función perjudica las cuerdas, ya que si bebes demasiado subes la temperatura corporal y provocas un flujo sanguíneo extra en las cuerdas vocales, eso repercutirá en la fonación y puede que produzcas un sonido mas áspero de lo normal.

 

Notas entresacadas de: Michael Mc Callion, El libro de la voz, ed. Urano, 1989.