No soy de aquí, ni soy de allá
Mi nombre es Jhon Ardila. Nací en 1983 en un trozo de tierra colombiana que reivindica orgulloso sus raíces históricas insurrectas (El departamento de Santander). Crecí escuchando a mis padres ganarse la vida con la lengua y todos su recursos (son comerciantes). Por primera vez vi a un narrador de cuentos orales profesional en el año 2000. Aquello me emocionó e impresionó. Decidí formarme como tal y por primea vez conté un cuento ante un público en el año 2003. Fue desastroso. Me licencié en derecho en el año 2005 con la idea romántica de ser un abogado al servicio del pueblo. Las leyes se encargaron de decepcionarme, pero las gentes que defendía me llenaron de ilusión. Como abogado defensor de derechos humanos escuché muchas historias; unas trágicas y otras esperanzadoras. Escuchando a obreros, campesinos, trabajadores, indígenas y víctimas, hombres y mujeres, concluí que las dos cosas (lo jurídico y los cuentos) me movían hacia el mismo lugar; contribuir minúsculamente a hacer del mundo un lugar mejor, donde todos viviéramos con dignidad. De la mano de esa idea seguí caminando; con la defensa jurídica de los derechos y con los cuentos orales. Y así, la buena suerte me trajo hasta Sevilla-España en 2009 para cumplir varios sueños; estudiar derechos humanos, contar cuentos fuera de mi país de origen y conocer mundo. Las tres cosas han sido posibles gracias a mi oficio de narrador de historias. Gracias a los cuentos cambié y re-enfoqué mi trabajo de investigación doctoral (mi idea inicial era un aburrido trabajo sobre jurisprudencia internacional de derechos humanos, hasta que mi maestro me escuchó contando y me propuso investigar sobre ello). Gracias a los cuentos he logrado viajar a inhóspitos destinos para trabajar. Gracias a los cuentos pude y puedo conocer “otros mundos”, literal y metafóricamente.