Hábitos saludables para cuentistas
El presente artículo es, sencillamente, una excusa para compartir con vosotros y vosotras algunas cuestiones relativas a los hábitos saludables que he ido asumiendo a lo largo de estos años y que me han resultado de utilidad en el devenir de los días de este oficio nuestro. Seguramente me he dejado unos cuantos: os invito a que los incorporéis en los comentarios al artículo.
Del tiempo en casa
Actividad física. Son muchas las horas que pasamos leyendo libros, escribiendo o consultando delante del ordenador. A veces estas tareas son especialmente absorbentes, por ejemplo cuando estás preparando un nuevo espectáculo de cuentos, o en esas temporadas en las que no paras de enviar presupuestos o proyectos que te han pedido, o cuando tienes que actualizar la web o el blog y revisar redes sociales. Hay días que, si te descuidas, podrías pasarlos sentado, apenas sin moverte, leyendo o escribiendo. Y lo que es peor, a veces encadenas días de ese tipo, uno tras otro, hasta sumar muchos.
Es por eso que para evitar un sedentarismo que resulta verdaderamente incómodo (cuando te levantas estás molido y sin fuerzas para nada) me obligo a realizar prácticamente todos los días algo de actividad física. En mi caso al menos dos días en semana suelo ir a nadar y el resto, a pasear (un mínimo de una hora).