en catalán

Navegando por la red nos hemos encontrado con este proyecto vinculado a la narración oral (entre otras cosas). Se trata de Contes pel món (Cuentos para el mundo).

Contes pel món es una Fundación que nace en 2008 con la misión de promover el acceso de todos los niños y las niñas a la cultura universal, tanto escrita como oral, preservando y recuperando la sabiduría de las culturas tradicionales que pervive en sus cuentos populares.

Sus campos  de actuación son  la cultura y la educación y trabajan fomentando las culturas autóctonas minoritarias y promoviendo el respeto por la diversidad cultural con voluntad de que los cuentos lleguen a los niños y las niñas de cualquier rincón del planeta.

Contes pel món quiere ser una entidad cultural referente en el ámbito catalán e internacional en el fomento de la narración, la lectura, la edición y la recuperación de cuentos populares. 

Su objetivo es generar nuevos modelos de enseñanza a través de la revitalización del uso de la palabra como canal más genuino de transmisión intergeneracional de conocimiento y valores dentro de la comunidad; pero también a través del diálogo cultural internacional en las escuelas, trabajando tanto con los niños y las niñas como con los y las docentes mediante la plástica y la narración, con la difusión y el intercambio de las narraciones orales y las literaturas tradicionales de sus comunidades como punto de encuentro para el diálogo intercultural.  

Cuentos de importación ha sido un proyecto que nació en el marco del Festival de la oralidad Huesca es un cuento en 2012. En ese momento comenzaba el trabajo que durante un año he desarrollado recogiendo cuentos y textos de tradición oral entre los inmigrantes que habitaban en la ciudad de Huesca. La idea nacía buscando la tradición oral, y los cuentos principalmente, como nexo de unión entre las diferentes culturas que vivían en la misma ciudad. El proyecto pretendía también resaltar la riqueza y los valores que nos aportaban todos aquellos que llegaban a esta ciudad. 

Tras doce meses de trabajo llegué a entrevistar a más de cuarenta personas de 23 nacionalidades diferentes, de las que fueron seleccionadas 35, y que aportaron 44 cuentos y 23 canciones, estando representados los continentes de África, Asia, América y Europa.  

En un principio se pensó en trabajar principalmente con un determinado barrio de la ciudad donde se concentraba un mayor número de inmigrantes, pensando que sería más fácil poder desarrollar allí las entrevistas. La realidad fue que el trabajo salió adelante gracias a los círculos de amistad y a las propias redes que hay tejidas entre los inmigrantes, extendiéndose finalmente el área geográfica por todos los barrios y todas las capas sociales de la ciudad. Los colegios, las bibliotecas municipales y algunas asociaciones también fueron de gran ayuda a la hora de hacer contactos.